¡La estación más deseada del año ya ha llegado! El verano es sinónimo de muchas cosas buenas, pero también de cambios de hábitos que pueden perjudicarnos. En general tendemos a relajar nuestras revisiones médicas, horarios y dietas y todo esto puede verse reflejado en nuestra salud bucodental. 

Si en verano nos olvidamos un poco de nuestros dientes, es bastante posible que en otoño tengamos que lamentar alguna caries, así que vamos a daros unas pautas o consejos con los que no tener que lamentar con la vuelta al cole molestias o tratamientos evitables.

Consejos para cuidar la salud bucodental también en verano 

Os vamos a proponer consejos sencillos de seguir, donde la dificultad tan solo residirá en nuestra capacidad para disciplinarnos, pero solo un poco. Cuidar de nuestra boca y dientes no tiene por qué tomarnos mucho tiempo ni dinero y seguir haciéndolo en verano redundará en nuestra salud general todo el año.

Toma nota de estos seis tips y consigue que tu verano no suponga un riesgo bucodental ni una sorpresa desagradable, al mismo tiempo que disfrutas de las actividades veraniegas que más te gustan:después de todo estás de vacaciones y es tiempo de disfrutar.

1 Mantén las buenas costumbres

No hay nada más fácil que perder una rutina de higiene bucodental en vacaciones. Esos cinco minutos diarios que dedicamos a pasar el hilo, la seda, los cepillos interdentales, o enjuagarnos con un colutorio van a ser seguramente de los primeros hábitos en “caer” en cuanto tus vacaciones comiencen.

Esto normalmente se debe a la necesidad de relajación que acumulamos durante el resto del año, donde los horarios y el despertador marcan nuestras vidas y, en cierto modo, nos rebelamos contra esta esclavitud saltándonos hasta lo más básicos.

Cepillarse correctamente los dientes no cuesta más de dos minutos después de cada comida, realmente es muy poco tiempo, y los beneficios y capacidad de prevención son tan grandes que realmente vale la pena dedicárselos. 

Recuerda colocar tu cepillo (que debes renovar aproximadamente cada tres meses) en perpendicular al diente para cepillar la cara exterior. Después haz un movimiento de barrido para la cara interior y no olvides las caras o superficies horizontales de tus muelas. También la lengua requerirá un cepillado de unos segundos.

 

2 Cuida tu alimentación también en verano

Por la relajación imperante es fácil caer en dietas rápidas y que aportan pocos nutrientes. Los alimentos procesados, ricos en sal, conservantes, etc., no son la dieta healthy que tus dientes necesitan. Debes evitar comer entre horas, y si no puedes evitar caer en la tentación, recuerda que hay snacks más saludables que otros. 

A nuestros dientes les gustan los cereales, verduras y frutas, lácteos y proteínas. Y seguro que vas a encontrar mil y una manera de prepararlos de forma fresca y rápida para dedicar tu tiempo en verano a cosas más divertidas que cocinar. Apuesta por ensaladas muy completas con cereales como el arroz integral o legumbres. 

 

3 No pospongas la visita al odontólogo

¿Tienes alguna molestia o te preocupa el estado de salud de alguna pieza o zona de tu boca? Pues no pospongas la visita al odontólogo solo porque es verano. Una revisión a tiempo puede atajar de raíz un problema que con el tiempo tan solo empeora (como una caries). Y esto mismo es aplicable si notas que tu férula de descarga no te resulta tan cómoda como debiera o si tus brackets te están causando molestias inesperadas. 

 

 4 El dulce, tus dientes y el verano

Los helados son una tentación difícil de resistir, pero abusar de ellos no solo es malo para nuestros dientes, también para nuestra salud en general. Al igual que ocurre en otras fechas festivas o señaladas como la Navidad, es época de probar todo lo que no probamos durante el año y de visitar lugares cuya gastronomía nos llama la atención. 

 

5 La hidratación es lo primero

En verano sudamos mucho más y es posible que nuestros niveles de hidratación caigan en picado de manera más o menos constante. Notarás que tu boca está seca y eso no es nada bueno para tus dientes, que necesitan que los mantengas protegidos de infecciones. 

 

6 Los malos hábitos, a raya incluso en vacaciones

Por último, todos nos permitimos cosas en verano que durante el resto del año están prohibidas, como saltarnos el entrenamiento regular, beber más alcohol del habitual o incluso permitirnos fumar durante unas semanas. Incluso aunque sea por un tiempo limitado, beber alcohol y fumar es muy malo para nuestra salud bucodental. 

 

Esperamos que estos consejos os ayuden a mantener sana y fresca vuestra sonrisa y que consigáis disfrutar de un gran verano sin contratiempos. Y ante cualquier duda o molestia, os esperaremos para velar por la salud oral. ¡Felices vacaciones!